Estaba pensando si responderte todos los puntos o no, pero me daba mucha pereza, así que me voy a centrar en este punto, que puede resumir todo bien.
Todo el tema de ataques, copias, poder del equipo de devs, consenso, etc… es un gran problema en todas las criptos. Que la gente lo ignore no significa que no exista, pero ahí están, y algún día explotarán, cómo está ocurriendo con los forks de bitcoin.
Para mí el tema del consenso y el poder de la minería está roto, y es una de las cosas que me gustan de iota.
La diferencia es que aunque ahora iota esté centralizado, tanto por su equipo, cómo por el uso del coordinador y más aspectos… son cosas que se saben públicamente. Cuando compras iota o decides participar en el proyecto cómo sea, es lo que hay. La diferencia es que iota si que aspira a ser realmente descentralizada, porque el objetivo es que el protocolo alcance una versión final que sea inmutable, no sujeta a cambios por consenso (que siempre es corruptible), que pueda usarse como standard sin miedo a grandes cambios para poder ir integrada en gran cantidad de dispositivos.
Y si, tiene la contra de no poder mejorarse cuando llegue el momento, y quizás quedar obsoleta, pero esa es la apuesta que se hace al entrar en iota, y el objetivo que tiene. Y también se acepta que el desarrollo esté liderado por la fundación y el equipo que hay detrás.
Durante todo el proceso se irá abriendo todo, y en su versión final será open-source, y más descentralizado que bitcoin y cualquier otra cripto hasta ahora, pues sin problemas de consenso, todos los nodos aportarán lo mismo. IOTA está en sus muy primeras fases, y lejos de lo que busca ser, así que paciencia. Y su focus está en el desarrollo, no en el márketing o llegar a x capitalización, así que el que tenga prisa, puede ir saliendo.