Yo creo que eso no es una visión realista. Si tienes una blockchain, tienes que tener a alguien que organice los bloques, esto por definición, no se trata de lo menos malo, sino de lo que hay que hacer.
Si ese trabajo resulta que es una tarea muy compleja y cara, entonces centralizarás la operación, como sucede con con PoW y BTC, lo que debilitará a la red P2P y además hará muy caras las transacciones y horriblemente lentas.
Si, por contra, hacemos la tarea más sencilla, como sucede con DPoS, el quid es quien la hace, porque debe ser alguien controlado por la mayoría democrática (cada token un voto) de la red.
La mejor solución, entonces, es distribuir ese trabajo entre varios testigos que sean elegidos por cada votante, que se puedan sustuir y promocionar, y que además el turno de creación de bloques de cada testigo sea barajado aleatoriamente una vez al día.
Por otra parte se puede contribuir también a la red con los nodos delegados, que son elegidos de manera similar. Los delegados tienen el privilegio de proponer cambios a los parámetros de red. Estos parámetros incluyen todo, desde las tarifas de transacción hasta los tamaños de bloques, el pago de testigos y los intervalos entre bloques. Después de que la mayoría de los delegados hayan aprobado un cambio propuesto, se otorga a los interesados un período de revisión de dos semanas durante el cual pueden votar a los delegados y anular los cambios propuestos.
Realmente, no creo que haya forma mejor de resolver el problema ¿cuál?
En realidad la única solución sería prescindir de la blockchain y pasar a Tangle, eso sí que podría funcionar mejor, pero para las blockchains…ya me dirás como lo organizarías.